LA POTENCIA REGIONAL
Por Kelder Toti
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Por Kelder Toti
En el ámbito de las
relaciones internacionales, una potencia regional es un Estado que posee poder
en una región geográfica. Estas potencias definen la polaridad de todo complejo
de seguridad regional. Los Estados que ostentan un poder e influencia por
encima de sus vecinos en una región del
mundo poseen hegemonía regional, que puede ser del tipo económica, ideológica y
militar. Las potencias regionales definen y conforman la polaridad de una
región. Generalmente, las potencias regionales poseen capacidades que son
relevantes e importantes en la región pero no poseen capacidades a escala
global, que le permitan ser una superpotencia. Existen diversas definiciones
ligeramente diferentes sobre las cuales son las características que definen a
una potencia regional. El European Consortium for Political Research define a
una potencia regional de la siguiente manera: "Un Estado que pertenece a
una región geográfica definida, que domina la región desde un punto de vista
económico y militar, capaz de ejercer una influencia hegemónica en la región y
una influencia considerable a escala mundial, deseoso de hacer uso de los
recursos del poder y ser reconocido y hasta ser aceptado como un líder regional
por sus vecinos".
El Instituto Alemán
de Estudios Globales y Regionales establece que un estado regional es aquel que
satisface los siguientes criterios:
• es parte de una región definida con una
identidad propia
• proclama que es una potencia regional
(imagen propia como potencia regional)
• ejerce una influencia decisiva en la
extensión geográfica de la región como también en cuanto a su construcción
ideológica, seleccionando a los miembros que conformarán la élite funcional
• dispone de capacidades comparativamente
desarrolladas en cuanto a lo militar, económico, demográfico, política e
ideológico
• La región se encuentra integrado al país
• Define en gran medida la agenda de seguridad
de la región
• Es considerado una potencia regional por las
otras naciones de la región y en otras latitudes, especialmente por otras
potencias regionales
• Se encuentra bien conectado con los foros
regionales y globales.
Algunos Estados pueden ser considerados
tanto una superpotencia y una potencia regional. Así mismo algunos Estados
pueden ser considerados tanto una potencia intermedia como también una potencia
regional.
La acción social es
ilógica y mucho de la acción personal
está diseñado para dar a las acciones no racionales una excusa de lógica. Somos
conducidos por instintos y retóricas que
justifican tales acciones. Lo más importante que todo esto tiene que ver con el
conservadurismo y la toma de riesgos; y la historia humana es la historia de la
dominación alternativa de estos sentimientos en la élite gobernante, la cual
llega al poder con la fuerte tendencia al conservadurismo de los “leones”, pero
poco a poco cambia a la filosofía de los "zorros" o especuladores, al
encontrar oposición ejecutando acciones de fuerza, mientras la oposición
ejecutará acciones violentas.
Esto produce una
catástrofe, que si no se sabe manejar puede terminar en una perenne
inestabilidad (golpes de Estados, revueltas urbanas, guerra civil e
inestabilidad), con un subsecuente retorno al conservadurismo. Este ciclo puede
ser interrumpido por el uso de la fuerza, pero la élite se vuelve débil y
humanitaria y se rehúsa a usar violencia, y la justifica con los derechos
humanos.
Hay dos tipos de
clases gobernantes (la élite constituida por los mejores elementos de la
sociedad: élite funcional): los "zorros" y los "leones".
Los "zorros" son calculadores, pensadores y materialistas, mientras
que los "leones" son conservadores, idealistas y burocráticos. La
élite no es hereditaria y, por lo tanto, habrá una circulación de élites, con
los consiguientes cambios de régimen, esta dura aproximadamente veinte años.
Lo ideal, sería que
la élite funcional (los mejores) y la élite del poder coincidieran, y
ejecutarán un proyecto de país, que le permita imponerse en la región. Pero
esto no es así, pues hay quien gobierna sin ser élite (por influencias,
familias, pertenecer al ámbito militar, suerte, contactos, etc.). Si esto se
generaliza, la élite en el poder se cierra frente a la nueva élite que surge de
la masa, pues tiene más capacidad, transformándose en una aristocracia,
cerrándose a la circulación de las élites, y perdiendo el aparato gubernamental
eficacia. Esto lleva a la decadencia y el colapso, lo cual necesitan y conducen
a su sustitución, esto puede suceder gradualmente o a través de una revolución
o revuelta militar: "La historia es un cementerio de aristocracias",
dijo Vilfredo Pareto.
Una élite funcional,
o buena, es aquella donde hay un buen equilibrio entre zorros y leones. Cuando
hay muchos zorros en la élite, los leones se rebelan, y viceversa. La élite
debe ser de calidad y circulante, en
permanente cambio para poder escoger a los mejores, permitiendo la
sobrevivencia del país; lo lamentable es que la élite funcional tiende a
emigrar, perdiendo el país la posibilidad de hacerse viable en el corto plazo,
sustituyéndola grupos de presión que no tienen la consistencia para ser
catalogados de élite, por lo tanto la conducción es precaria.
La otra constante es
la meritocracia, dentro del aparato burocrático
es una forma de gobierno basada en el mérito. Las posiciones jerárquicas son
conquistadas en base al mérito o a la educación, y hay una predominancia de
valores asociados a la capacidad individual o espíritu competitivo tales como,
por ejemplo, la excelencia en la educación o los deportes. La meritocracia está
asociada, al Estado burocrático, siendo
la forma por la cual los funcionarios estatales son seleccionados para sus
puestos de acuerdo con su capacidad (a través de concursos, por ejemplo). La
postulación es el favoritismo o “los contactos”, perdiendo la burocracia
operatividad por la mediocridad de su personal al no ser evaluado su desempeño,
sustituyendo a los no aptos. O también más comúnmente asociados a los exámenes
de ingreso o evaluación en las escuelas, en las cuales no hay discriminación
entre los alumnos en cuanto a las preguntas o temas propuestos. Así, la
meritocracia también indica posiciones conseguidas por mérito personal dentro
de una empresa.
Aunque la mayoría de
los gobiernos están basados, en parte, en la meritocracia, ésta no se expresa
de forma pura en ningún lugar. Gobiernos como el de Singapur o Finlandia
utilizan estándares meritocráticos para la elección de autoridades, aunque
mezclados con otros elementos. El problema radica en la escogencia de los
candidatos, que pueden no tener la levadura para desempeñarse en el cargo, solo
la evaluación constante permite escoger a los mejores.
El principal
argumento a favor de la meritocracia es que proporciona mayor eficiencia que
otros sistemas jerárquicos, pues las distinciones no se hacen por sexo o raza,
ni por riqueza o posición social, entre otros factores biológicos o culturales.
Aunque existen clases sociales, la meritocracia no pretende acabar con ellas.
El mérito del esfuerzo individual se entiende como un criterio más justo que
otros para la distribución de los premios y ventajas sociales asociadas.
En una democracia
representativa, donde el poder está, teóricamente, en las manos de los
representantes electos, los elementos meritocráticos se incluyen en el uso de
consultores especializados para ayudar a la formulación de políticas y en un
servicio civil meritocrático para implementar dichas consultorías. El problema
perenne de la defensa meritocrática es definir, exactamente, que se entiende
por "mérito" y escoger a los mejores, esta contradicción hace posible
que la burocracia sea altamente ineficiente, quitándole viabilidad al país.
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